Jordan D. Crowell

 Jordan no tiene reglas, no tiene límites y es increíblemente ambicioso sobre dónde quiere llegar. Jamás le ha faltado nada, se ha creado rodeado de comodidades, viendo como todo lo que pide llega rápidamente a sus manos, por tanto no entiende lo que es un no. Es egocéntrico y egoísta, solamente piensa en él, puede que en algún punto se interese por el bienestar de otra persona, pero solo luego de estar seguro que él tiene todo lo que quiere y que aquello no le afecta; primero él, segundo él, tercero él y cuarto otra persona, que le sirva a él.

Es bastante estratégico, aunque solo en asuntos importantes, no se gasta en estupideces. Muy inteligente y observador, a partir de esas cualidades es que sabe muy bien como pensar cada uno de sus pasos para evitar cabos sueltos que le puedan afectar. Sabe lo que vale, sabe lo importante que se vuelve para algunas personas, sabe que llama la atención y por supuesto que se hace valer. Un tanto narcisista, tiene cierto talento para llamar la atención, no es que quiera ser florero de mesa, más bien de forma elegante atrae miradas. Tiene muy claro las cosas que quiere y las cosas que odia, como por ejemplo, los muggles y sangre sucias, los mestizos le dan algo de pena, pero nada de misericordia. Le encanta hacerse la vida imposible a aquellas personas, no soporta la idea de que se les considere igual a él, principalmente la idea de que se les considere magos cuando están claro que están por debajo de los sangre pura.

Cuando quiere algo no deja que nada se le interponga, puede traicionar hasta a un amigo cuando se trata de conseguir su objetivo, como ya les dije, no tiene límites.

Es encantador cuando quiere, divertido, arriesgado, elegante y culto. Misterioso, jamás habla sobre su vida, no cuenta nada sobre sus intimidades. A veces puede ser algo solitario, no es mucho de querer estar rodeado de gente que no le interesa y solo se obliga a soportarles cuando sus padres lo obligan a hacerlo. En general, con aquellos que considera algo más a su altura, es sociable. Muy coqueto, seductor, no acepta un no por respuesta, es apasionado y directo. Aunque en absoluta es un enamoradizo, odia las cursilerías, odia los sentimientos profundos y aquella estupidez de la belleza interna; para Jordan todo es físico cuando se trata de mujeres, no quiere relaciones serias, adora las aventuras, aunque en alguna ocasión ha cedido a ponerle nombre a alguna relación, pero sin duda nada cambia aparte de eso.

Puede llegar a ser muy vengativo, no tolera que le fallen o lo traicionen y no descansa hasta acabar con toda posible felicidad de aquella persona. Algunos dicen que jamás desarrolló lo que es la conciencia, ya que no vive con culpas, simplemente vive.

Jordan Crowell es el primogénito de una pareja de gran poder en el mundo mágico, sangres pura y ex’s motífagos. Desde que nació estuvo rodeado de lujos, sus padres le heredaron principalmente aquella personalidad fría y una creencia ferviente de que los sangre pura y mestizos son la escoria de la sociedad. Antes de ingresar a Hogwarts ya tenía clases en casa, sobre duelos, idiomas, encantamientos, historia de la magia, etc. La mansión siempre permanecía fría, pero a Jordan le gustaba aquello, adoraba correr por los pasillos jugando, aunque a sus padres les fastidiara aquel ruido. Más de una vez intentó lanzarse por la gran escalara principal, por el pasamanos, consiguiendo grandes regaños de sus padres. Cuando comenzó a crecer aquellos juegos se acabaron, convirtiéndose en un chico serio y protocolar, al menos frente a sus padres.

Desarrolló un humor negro que no dudaba en ocupar con su hermana o con las eternas huéspedes de la mansión, las hermanitas Cassier. A los once años recibió su carta de Hogwarts, sin duda un día llenó de alegría, nadie tenía duda de que el joven entraría a Slytherin y así fue, sin duda la casa de las serpientes era una tradición en los Crowell.

En Hogwarts potenció todo aquello que ya sabía y logró alejarse un poco de la influencia de sus padres, pensando por sí mismo, cosa que en ocasiones lo volvía aún más frío y cruel. Los años que siguieron fueron bastante tranquilos, entre estudios, fiestas de Slytherin y partidos de Quidditch, aunque solo como espectador hasta ese momento. El problema comenzó cuando entró su hermana a Slytherin, ella y su personalidad tan comprensiva que no dejaba de odiar, haciéndose amigas de sangre sucias y hablando con ellas en los pasillos como si todo estuviera bien. Rápidamente sus padres se enteraron volviendo el problema, problema de Jordan. Durante un tiempo procuró fastidiarle las malas amistades a su hermana, pero la chica siempre ha tenido su carácter y él tampoco andaba para estar cuidado a una niña, así que simplemente le ignora, a menos que sea muy importante.

Buen estudiante, impecable, irónico y llamativo, cosas que resume la imagen e historia de Jordan estos años. Con los últimos acontecimientos del mundo mágico, tiene bastante clara su postura y no teme en expresarla, haciéndole la vida imposible a todo aquel que este de la vereda opuesta.

Edgard Crowell || Padre || 45 años
Chloe Lambert || Madre || 43 años
Crystal Crowell || Hermana || 15 años || Slytherin